Si
nuestro sistema de depilación predilecto es el de las ceras depilatorias, en
este artículo le brindaremos información detallada acerca de los tipos que hay,
sus características y propiedades. Esperamos que le sea útil esta información.
¿Cuáles son los tipos de cera para depilar más comunes?
Los tipos
de cera que podemos encontrar se dividen en ceras frías o ceras calientes (o para calentar, mejor dicho).
En
cuanto a las ceras frías, son más
prácticas que las calientes puesto que ya vienen listas para utilizar, sobre
todo las que traen añadida la banda de tela que permite que retiremos la cera
una vez colocada en la piel. Si no trae consigo la banda, podemos encontrarla
sola en forma de pastillas o cera sólida y agregarle nosotras mismas una banda
de tela propia. Su consistencia es blanda y flexible, y puede traer todo tipo
de componentes hidratantes que se adapten a los distintos tipos de pieles, como
esencia de rosas para pieles secas o azuleno para pieles normales.
Por otro
lado, la consistencia de la cera para
calentar es más dura y es por eso que tenemos que exponerla al calor.
Cuando aumenta su temperatura se ablanda hasta lograr la elasticidad necesaria
para poder aplicarse en la piel. El tema de la temperatura es importante puesto
que si cuando nos pasamos la cera ésta se encuentra muy caliente, podemos
quemarnos y dañar gravemente nuestra piel. Este tipo de ceras también las
podemos encontrar en pastillas, cera sólida o en el sistema ROLL-ON, un sistema bastante reciente que incorpora
dispositivos especiales para calentar y colocar la cera. A su vez, también
pueden traer ingredientes que proporcionen distintos efectos a nuestra piel,
como por ejemplo aloe vera para pieles sensibles o esencia de fresa para pieles
secas.
El resultado de cada una de ellas dependerá de nuestras características dérmicas, la calidad de la cera y los componentes que incorpore.
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