La pérdida del cabello es una problemática que ataca tanto a hombres o como a mujeres. A esta afección se la conoce como "alopecia" y puede ser parcial o total y deberse a múltiples factores.
Hay muchas razones por las que nuestro pelo se puede caer, alguna de ellas pueden ser las siguientes:
- Causas hereditarias
- Estrés físico o emocional
- Anemia
- Lupus
- Sífilis
- Quemaduras
- Cambios hormonales
- Tiroides
- Uso excesivo de químicos para el cabello
- Planchas o secadores
- Ansiedad
- Radioterapias
- Tumores en los ovarios o en las glándulas suprarrenales
- Etc...
En el mercado existen muchos productos que prometen evitar y detener la caída del cabello, pero son muy pocos los que logran resultados eficaces.
Por otro lado, si tenemos este problema y deseamos llevar a cabo un tratamiento más profundo, quizás los resultados sean buenos pero debamos contar con un presupuesto bastante alto.
Una buena alternativa para lidiar con la alopecia son los "remedios caseros". Existen algunos aceites esenciales, por ejemplo, que sirven para tratar este padecimiento y que han demostrado ser eficientes.
Los más conocidos en este ámbito son:
- Aceite esencial de rosa mosqueta: rico en vitaminas y minerales, actúa como regenerador y reparador del cabello, y además estimula su crecimiento sano y fuerte.
- Aceite esencial de romero y tomillo: se pueden usar juntos o por separado. De cualquier forma tienen propiedades parecidas, son grandes estimuladores del bulbo piloso. Además, tienen incidencia en la irrigación sanguínea y propiedades anti-caspa.
- Aceite esencial de coco: es muy recomendado para tratar la caída de cabello por estrés.
- Aceite esencial de manzanilla: utilizado para proteger el cabello y favorecer su crecimiento.
- Aceite esencial de cedro: este aceite sirve más como complemento para otros aceites más potentes, como por ejemplo el aceite de coco. También es recomendado para la caspa.
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